viernes, 3 de mayo de 2013


Eco Celtas: reciclar, reutilizar y transformar para crear

Nada es desechable en las manos de Jeanette y Susana Santana, dos hermanas a las que les sobra imaginación y entusiasmo para rescatar materiales de las papeleras y darles una segunda y utilitaria oportunidad.
Indiana Galindo Alonso
 
Jenette y Susana Santana transforman materiales de desecho en objetos verdaderamente utilitarios y decorativos.
Fotos: TANYA MILLAN
  Jeanette Santana es de esas personas que todo lo guardan con la idea de que en algún momento les puede servir para algo, pero muy lejos está de ser una acumuladora compulsiva que abarrota su casa de objetos inútiles. Por el contrario, ella tiene un don especial para transformarlos.
Donde muchos solo encuentran una lata de refresco, Jeanette puede ver un portavelas. De las latas de atún, la caraqueña hace joyeros. Y así con todo lo que se atraviesa en su camino. Antropóloga de formación y dedicada al cuidado de su familia y de su hogar, desde hace tiempo es consciente de su habilidad para los trabajos manuales, aptitudes que ha cultivado a fuerza de ensayo y error y con la ayuda de la superautopista de la información.
Hace un par de años la muerte de su mamá la inspiró a darle más formalidad a lo que hasta entonces había sido una especie de práctica personal. Unió fuerzas con su hermana Susanapara rendirle homenaje a través de “Eco Celtas”, una iniciativa que pretende poner en práctica aquello de reciclar, reutilizar y reducir y darle salida a su preocupación por el medioambiente. Lo de “celtas” es precisamente un recuerdo de sus raíces: la madre de estas caraqueñas era gallega.
Lo que para otros es basura, se convierte en oro para estas emprendedoras. El papel de los periódicos y revistas es la materia prima con la que hacen jarrones, cestas, fruteros, joyeros, lámparas, floreros y cuanto objeto se les pase por la cabeza. Los acabados suelen impresionar por su calidad.
Los envases de plástico son algunos de los desechos que más preocupan a Jeanette ya que en el país no existen plantas procesadoras de este material.
Para contribuir un poco al problema las hermanas los transforman en flores. Las bolsas plásticas que se suelen acumular tras el mercado se convierten en sus manos en ovillos de hilo plástico con el que tejen bolsos y carteras gracias a un ganchillo hecho de un cepillo de dientes que dejó de cumplir sus funciones.
Las dos lo tienen claro: más que un pasatiempo o un emprendimiento, se trata de un concepto de vida que todo el mundo tiene que asumir si quiere dejarle algo más que problemas a sus descendientes.
Entre todos
Las hermanas Santana cuentan con la ayuda del esposo de Jeanette, William Gallardo, que se encarga de la comercialización de los productos. Para más información visitar: www.facebook.com/eco.celtas o llamar a los teléfonos: 04123544170 y 04123575496.
Tomado de El Sol de Margarita

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