domingo, 9 de junio de 2013

Esther Izaguirre: Estoy anclada en una Isla que amo

Con respecto a sus vivencias diarias le encanta la playa, la gastronomía insular y el modo de ser del margariteño.
Yanet Escalona

Esther Izaguirre, Decana de la Facultad de Humanidades de la Unimar.
Foto: JORGE BRITO
 Centrada, sin que nada pareciera alterarla, Esther Izaguirre mira al futuro y analiza el presente. Lo suyo es la educación, porque considera que esa es la mejor arma para que la sociedad evolucione hacia mejores niveles de vida. Como el mundo da tantas vueltas, Esther tuvo la oportunidad de vivir 21 años fuera del país luego regresó a su natal Caracas para al final “anclarse” en la isla de Margarita, a la cual confiesa que “ama”.
Al igual que muchos otros navegaos” que han hecho vida en esta región insular, Esther no es la excepción y en tal sentido afirma que está “anclada” en esta región en la cual vive con intensidad, participa de diferentes actividades culturales, sociales y académicas.
Setenta con orgullo
Con 70 años de edad que no aparenta, Izaguirre muestra mucha vitalidad. La delgadez que delinea su fisonomía se multiplica en energía a la hora de emprender nuevos proyectos. Afirma que por ser ya una margariteña más le encanta todo lo que venga de la insularidad e idiosincrasia, gente, cultura comida  y playas.
Aparte de eso ha cultivado muy buenas amistades en Margarita. En lo laboral fue adjunta a la dirección de Cultura de la gobernación del estado Nueva Esparta, en la oportunidad en que era su titular el recordado cronista y farmaceuta Ángel Félix Gómez. Luego hizo un interinato en dicho cargo  antes de que ese despacho derivara en el actual Instituto Autónomo de Cultura del estado Nueva Esparta, Iacene.
A estas alturas de su vida está convencida de que quiere continuar contribuyendo para que mejore la parte educativa y en las relaciones sociales. Como antropóloga social valora esa visión amplia de lo que sucede alrededor y en donde nada es casual. Todo hay que saber interpretarlo y actuar conforme a una realidad sujeta a un entramado.
 Educación como clave
En este ámbito considera que la educación juega un papel fundamental para las transformaciones que requiere el país. Si bien se habla de socialismo, dijo que más bien prefiere  referirse a la lucha por la  justicia social que más allá de lo ideológico o visión parcelada de la realidad conlleve a un trabajo colectivo a favor de una mejor calidad de vida y formación del ser humano.
Vital es comenzar desde la escuela. Compara cómo los niños de Inglaterra, un país desarrollado, desde los siete u ocho años ya leen, e investigan y de ese modo van formando su propia interpretación de lo que ocurre alrededor con criterios y buenos fundamentos.
-En nuestro país hemos visto en cambio que el bachiller ingresa a la universidad con serias deficiencias en áreas básicas como lengua y matemáticas, entre otras. Incluso algunos no interpretan lo que leen.
-Particularmente me preocupa el caso de Nueva Esparta que después de ser un estado con excelencia académica donde en la capital, la Asunción se decía “hasta los mangos son bachilleres”, ahora vaya en picada su nivel académico.
Como decana de la Facultad de Humanidades, Arte y Educación de la Universidad de Margarita, Unimar, Esther Izaguirre siente el compromiso de dar lo mejor de sí y aportar ideas para esa superación. Bajo su decanato tiene las carreras de Educación, Idiomas Modernos y Diseño Gráfico.
Ha iniciado ciclo de conversaciones y foros, entre otras actividades que permitan este punto de referencia y análisis dentro de ese ensamblaje. Una base que lleve al estudiante a ver más allá de lo que está a simple vista. Es profundizar en lo social y de cómo todo está vinculado. nada es aislado. Resalta, además, la importancia de retomar la formación de técnicos medios como se hacía antes en el bachillerato. Un joven que egresaba con más herramientas para la vida y para interrelacionarse en sociedad. “Esa es nuestra meta en la Unimar”, dijo, contenta con esta nueva responsabilidad.
Esther Izaguirre nació en Caracas en 1942. Vivió infancia feliz y cursó hasta la primaria en esta ciudad, por cuanto su familia decidió residenciarse en México durante 15 años, más otros seis en Canadá. Tras culminar el bachillerato se inscribe en Antropología Social,  carrera basada en el estudio de las relaciones y de los sistemas sociales que son propios de las diversas sociedades humanas, explican en www.ageac.org
Tomado de El Sol de Margarita

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