Sincronía de talentos en clave de jazz

Linda Briceño deslumbró al público con su presentación especial por el Día del Padre en el centro comercial La Vela de la urbanización Costa Azul. Junto a un ensamble de ensueño, interpretó sus canciones favoritas.

Indiana Galindo Alonso

Linda Briceño interpretó sus canciones favoritas en la terraza del centro comercial La Vela.

Fotos: GENESIS TORANI

 “¿Están listos para una explosión de jazz en Margarita?” escribió Linda Briceño en su cuenta oficial de Twitter mientras se dirigía a Maiquetía para subirse a un avión con destino a la que ella llama “una isla mágica”. No sospechó entonces que su maleta se perdería en el trayecto y que más tarde -mientras se encontrase en la terraza del centro comercial La Vela- el teclado de Gabriel Chakarji se rebelaría y subiría medio tono un “la” casi imperceptible para el público, pero que no dejaría de incomodarla el resto de la velada.

“Estamos preparados para esto”, dijo la cantante de 24 años, quien en agosto se unirá a la plantilla estudiantil de la neoyorquina New School of Music. Antes de partir, se despidió de su país con este espectáculo en el que también la acompañaron Gonzalo Teppa (contrabajo) y Adolfo Herrera (batería), con un el repertorio compuesto de sus canciones favoritas.

Cuatro generaciones de músicos se encontraron sobre la tarima en esa tarde que se extendió hasta la noche y que no dejó espacio para más espectadores en la terraza del centro comercial. Briceño comenzó su interpretación con un tema de Sarah Vaughan y Count Basie, luego de decir que había sido una de sus grandes influencias en la música.

A los 8 años –dijo la intérprete en el escenario- se dio cuenta de que una película no puede ser buena si su música no lo es. Fue gracias a “Batman Forever”, que incluyó “Kiss from a rose” de Seal en su banda sonora y con la que la trompetista hizo gala de su capacidad vocal.

Luego siguió “Dedicated to you” de John Coltrane, un personaje que le hizo entender que el jazz es un género sin fronteras.

Nat King Cole no faltó en el espectáculo de Briceño. Estuvo allí con “Nature boy”, una canción de Eden Ahbez que se ha convertido en uno de los éxitos más interpretados del jazz desde que el pianista y cantante la grabó en 1948.

Michael Jackson también fue incluido en la velada con una versión de “You’ve gota a friend” –compuesta por Carol King-, coreada por el público y que le dio espacio a Herrera y Chakarji para demostrar su habilidad con la batería y el teclado.

Este último robó varios aplausos a un público impresionado por su destreza con las teclas siendo tan joven: 19 años. El desperfecto que presentó su instrumento no opacó la calidad de su interpretación, cargada de energía y frescura. No en vano su compañera de ensamble le pidió al público que lo mirase bien, prometiendo que sería “más famoso que Dudamel”.

El delirio llegó con “Bésame mucho” en popurrí con “Historia de un amor”. Aquí la hija de Andrés Briceño y concertina de la Simón Bolívar Big Band Jazz recurrió al público para hacer el papel de corista con una pequeña clase improvisada.

“Fly me to the moon” de Frank Sinatra fue el preámbulo a un cierre en el que la propia Briceño vaticinó a sus espectadores cantando a todo pulmón: “Hey Jude” de The Beatles.

Así terminó una noche en la que no faltó la improvisación y que se convirtió en un regalo no sólo para los padres sino para quienes se animaron a ser testigos de “esa explosión de jazz” que prometió la intérprete al comienzo.

Logros

Linda Briceño cada vez está más presente en la escena nacional e internacional. En el mes de abril se presentó en la Gala de La Fórmula 1, celebrada en Bahrein. En agosto lanzará “Gold Sessions”, un disco en el que su padre Andrés Briceño se encargó de la batería.

Tomado de El Sol de Margarita